Enrique y Roberto Espeche cumplieron su sueño de ser dueños de una heladería en 2009. Comenzaron su negocio con poco más de 20 sabores pero con el tiempo se animaron a convertirse en la heladería con más gustos de la Argentina.
Este año, Plaza Crema fue reconocida con una mención de Honor a la Innovación y Diseño, en un evento nacional en el Senado organizado por la Confederación Argentina de Medianas Empresas (CAME). Por si fuera poco, durante la última visita de Mauricio Macri a la provincia, el presidente se presentó en la puerta del local para conocer a sus propietarios.
Con 150 variedades de lo más exóticas, el negocio se ubica en El Manantial, una pequeña localidad de Lules, en el centro de la provincia de Tucumán. Aunque su crecimiento fue inminente en los últimos dos años, los hermanos Espeche aseguran que por el momento no están enfocados en franquiciar.
"Nuestro foco es la familia. En una heladería céntrica compras el helado y salís, no conversas con nadie. Incluso si el domingo tenés un asado, compras el kilo de helado y te vas. Pero nuestra heladería tiene un concepto diferente, el de salida familiar y una aventura distinta. Queremos que digan ‘ ¿Qué hacemos hoy?, vamos al manantial a Plaza Crema a probar sabores raros’ y que se queden una hora, que disfruten el trayecto hasta llegar, que vean el cartel de los distintos gustos y se rían preguntando a qué sabe el helado de humo, de mate cocido, que se animen a degustar todos los sabores. ”, explica Enrique Espeche.
La heladería abrió sus puertas en 2009, pero en 2013 los Espeche redefinieron su concepto y elaboraron un proyecto con tres objetivos: convertirse en la primera heladería de Argentina especializada en sabores exóticos; seguidamente, aspiraron a ser reconocidos como la heladería con más sabores del país; y el tercer objetivo, consolidarse como punto turístico.
Hasta el momento aseguran haber alcanzado los dos primeros y estar a dos años de lograr su tercer objetivo. "Así como en Buenos Aires está la emblemática pizzería Güerrín, en Tucumán hay hitos gastronómicos como la sanguchería ‘Chacho’ y su famoso sánguche de milanesa. Ellos están trabajando el concepto con la Fiesta de la Milanesa, así como lo hace Famaillá con la Fiesta de la Empanada. Nosotros queremos convertirnos también en un ícono. Por suerte hoy, viene mucha gente del interior de Tucumán y de todo el país, pero vamos por más. Queremos mejorar el negocio en la parte edilicia, expandirlo, y consolidar el punto turístico. Además nos estamos capacitando en cómo interactuar con los visitantes, cómo conversar con el turista, qué historias contar.”
Los hermanos Espeche confiesan que uno de sus valores diferenciales es la forma en la que tratan a los clientes y es ese plus el que conserva la fidelidad de los consumidores. De hecho, Ricardo trata de no ser quien está en la caja o sirviendo helado porque prefiere limpiar las mesas para poder charlar con los visitantes.
"Si te pones a pensar una comida exótica es lo más fácil del mundo. La gente va porque le llama la atención, pero para que la gente vuelva los tenés que tratar bien, y eso implica muchas cosas. Por ejemplo, te preguntan qué gusto tiene el helado de pastafrola, y esa pregunta no tiene respuesta, pero cuando alguien va con tanta onda a hacerte una pregunta le tenés que conversar. Entonces le decimos ‘No sé qué gusto tiene pero probalo. Sí te puedo contar que la pastafrola en realidad se llama así en la Argentina porque es el nombre de la masa en Italia pasta frola o pasta brisa, que es la masa quebrada.’ Esto hace la diferencia.”, cuenta.
Otra de las claves del éxito de Plaza Crema está en la variedad de sabores, donde destacan gustos muy conocidos para los tucumanos. El helado de miel de caña, de algarroba, de lima, de arroz con leche o de mazamorra son algunos de los más solicitados por los curiosos.
Además, a la experiencia del sabor le sumaron la música con parlantes y encuentros en vivo afuera del local: "Nosotros nos propusimos varios objetivos, tanto a nivel social, cultural, familiar e incluso personal. No sabes de felices que somos, no te imaginás lo divertido que es fabricar helados raros, la gente se ríe de ver los carteles con los sabores y nosotros también.”
Los Espeche aseguran que uno de los días más indescriptibles fue la sorpresiva visita de Mauricio Macri, momento que quedó registrado en los celulares de los vecinos del Manantial. "Fue muy linda experiencia, visitó la fábrica, hablamos de helado y probó varios sabores. Eso también nos sirvió mucho para hacernos conocidos en otras provincias y nos contactaron medios de todo el país más ansiosos de saber sobre nuestros productos que de la visita en sí.”, explicó Ricardo, quien ve con gran entusiasmo los próximos años de labor.
"Es muy difícil competir y estar en la lucha contra los monopolios porque vienen franquicias grandes y te comen. No solo atentan contra la economía regional sino contra la creatividad. Por suerte, nosotros nos mantenemos lo más fieles posibles a nuestros objetivos. Es como se dice, cuando la pasas bien en lo que haces, es muy probable que te vaya bien.”
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