Como consecuencia de la crisis, los abogados privados de Tucumán coinciden que hubo una baja de clientes a pesar que los delitos aumentaron.
Voceros del Ministerio Pupilar y de la Defensa manifestaron que se ha registrado un incremento de los casos con representación pública en los tres centros judiciales: Capital, Monteros y Concepción. En particular, en “La Perla del Sur”, el 60% de los procesos penales “está en manos de defensores públicos”.
Además, desde el Ministerio se indicó que la mayoría de las personas que cumplen condena en una institución penitenciaria “deja la defensa de abogados privados”. “A partir de la pena, tienen que seguir bregando por sus derechos, como los permisos internos o salidas transitorias. La gran mayoría de los condenados”, señaló una alta fuente de la institución.
Ante estos datos, IN Tucumán entrevistó al abogado Pablo Montenegro para indagar sobre si la crisis ha perjudicado su economía, teniendo en cuenta que desempeña su profesión hace 15 años.
“A pesar de la crisis, y teniendo más de 15 años de ejercicio en la profesión, mi trabajo no se vio demasiado afectado. Es verdad que algunos tipos de procesos, en los cuales se requieren bastantes gastos de inicio, si ha mermado la demanda, pero en otros ha aumentado, por ejemplo los juicios laborales, ya que mucha gente perdió su fuente de trabajo y no percibió indemnización como corresponde”, aseguró.
“En lo que respecta a la parte penal, mi trabajo se mantuvo estable, ya que la mayoría de mis casos actúo como abogado de víctimas. Sin embargo, en algunos casos tuve que financiar el cobro de mis honorarios”, añadió.
Asimismo, se consultó sobre si percibió algún aumento en los casos de delito para abogados oficiales. “Considero que si hubo un aumento para aquellos colegas, en Tucumán hay gente de muy bajos recursos que recurren a ellos, ya que no pueden afrontar honorarios de abogados particulares. La mayoría de esos casos son delitos con penas menores y en etapa de investigación”, detalló.
Durante la entrevista, Montenegro explicó que los casos que requieren mayor demanda de un abogado privado son aquellos de mayor complejidad y que se necesita de un seguimiento y conocimiento más especializado , lo cual implica grandes sumas de dinero en juego.
Ante la afirmación del penalista Carlos Posse que se dio a conocer en otro medio, el cual sostuvo: “La baja de casos con patrocinio privado que se está produciendo ahora, se debe a la crisis socioeconómica. Las personas vinculadas a algún delito optan por destinar los pocos recursos que tienen a la familia y no cubrir el servicio de un abogado particular”.
Posse remarcó que estas circunstancias se presentan, sobre todo, ante las confirmaciones de las prisiones preventivas. “Buscan más a los penalistas privados para encarar un juicio oral, cuando se define la suerte de los imputados”.
Teniendo en cuenta lo expresado por Posse, Montenegro comentó: “Coincido con el colega sobre lo que dice, en esa etapa del proceso (juicio oral) buscan a abogados privados, ya que es necesario que se aboquen mucho más en esas instancias”.
Además dijo: “Las defensorías oficiales (abogados gratuitos) cuentan con excelentes profesionales y muy responsables, pero muchas veces se encuentran desbordados con tanta demanda”, concluyó.