El jueves pasado, el dueño de Alfajores del Tucumán, Rodolfo Mehlen expresó que “viven momentos muy tristes” por el cierre de la empresa debido a la poca actividad por la cuarentena obligatoria. “Así no se puede seguir”, comentó angustiado. Alfajores de Tucumán no solo cerró sus locales de atención en nuestra provincia, sino también en Santiago del Estero y Salta.
El emprendimiento nació en 1970 en la ciudad de Termas de Río Hondo, Santiago del Estero, y después de 8 años llegó a Tucumán con un local que se instaló frente a la Casa Histórica.
Por otro lado, cabe subrayar que, la empresa había donado una cantidad considerable de alfajores, galletas y tabletas que fueron distribuidos en los operativos de asistencia alimentaria para las familias que reciben ayuda desde el área social del municipio de Tafí Viejo, mediante diferentes programas.
De esta manera, la empresa Alfajores del Tucumán se suma a la crisis que viven actualmente los comerciantes. En este contexto, el pasado miércoles, la Federación Económica de Tucumán (FET) y el Sindicato de Empleados de Comercio de Tucumán se reunieron en busca de una solución a la crisis que se vive en el sector desde que inició la cuarentena, pero los resultados no han sido los mejores y aún se espera una respuesta por parte del gobierno provincial y nacional para ayudar a los empresarios a pagar los sueldos.
Por su parte, Alberto Guardia, presidente de la FET, expresó, “Hemos planteado las problemáticas del sector de comercio pero no hemos encontrado alguna solución. Tanto la parte empresarial como la parte de empleados están siendo muy afectados. La mayoría de las empresas están paralizadas y se están generando grandes problemas para sostener la actividad”, había afirmado luego del encuentro.