Este domingo, los argentinos se acercarán a las urnas para elegir quién los gobernará durante los próximos cuatro años. Sin embargo, más allá de las creencias e ideologías políticas, los ciudadanos se muestran expectantes acerca de lo que puede llegar a suceder con una economía que viene convulsionada desde mitad del año pasado.
Ante este contexto se le suma el pronóstico de las encuestas, que marcan un inminente cambio de Gobierno. Por esta razón, durante la última semana, los tucumanos se apresuraron en comprar dólares para prevenirse de lo que pueda responder la economía desde el próximo lunes y, sobre todo, por un temor a una nueva corrida cambiaria.
Cabe recordar que el lunes 12 de agosto, un día después de las elecciones Primarias, el dólar dio un estrepitoso salto, pasando de un promedio de $45 a rondar los $65 para luego estabilizarse cerca de los $60. El termómetro electoral fue en un aumento y en los últimos días el dólar comenzó a experimentar una leve suba, cerrando ayer en $62.
“Tenés la experiencia de lo que pasó luego de las Primarias, donde el dólar se disparó, y la gente tiene miedo de que vuelva a suceder. Hay una notable escasez de dólares, no vino el préstamo del FMI, entonces sólo se cuenta con el Banco Central, que ya vio disminuidas sus reservas, y la presión sobre el tipo de cambio es bastante grande”, aseguró el economista tucumano Andrés Rico.
Por lo pronto, Alberto Fernández intensificó sus declaraciones apuntando contra el presidente Mauricio Macri pidiéndole que “no cometa locuras, ni haga daño”, en clara alusión a lo que sucedió luego de las PASO. Según el candidato kirchnerista, después de ese resultado electoral, “el Gobierno liberó el dólar para que aumente”.
Desde la oposición ya se sienten ganadores de las elecciones y aclararon que uno de los temas que más preocupa, en relación a la economía, es la pérdida de reservas del Banco Central. Aunque prefieren no profundizar sobre la forma en que lo harán, el equipo económico piensa en poner mayores restricciones cambiarias, es decir endurecer el cepo existente hasta ahora.
“No sé si se dará algo así como otra corrida cambiaria, puede haber algún salto menor pero depende del resultado electoral, lo que sí, el lunes seguirá la presión del dólar. Si el oficialismo obtiene el balotaje la presión será menor, pero si gana la fórmula Fernández – Fernández, las expectativas se van a diluir y puede haber mayor control de cambios. El balotaje podría tranquilizar el mercado de cambios, pero la presión seguirá porque hay escasez de dólares”, señaló Rico.