En el marco del ciclo Conociendo a empresas y empresarios de la mano de Fundación del Tucumán, Jórge Ávila dialogó con IN Tucumán. El empresario de salones de fiestas contó cómo surgió la idea de adentrarse en este rubro y reveló las claves que hacen de la empresa un negocio perdurable en el tiempo, además de reflexionar sobre el rol del empresario y la comunidad de negocios en la provincia.
“Hace 11 años surgió de una conversación con uno de mis hermanos, de poder usar una casa quinta que tenía nuestra familia en Tafí Viejo, una casa, un quincho y algunos emprendimientos que teníamos allí como plantación de frutillas, paltas y una pequeña avícola. El lugar era el ideal para transformar ese quincho en salón. El gran desafío era la distancia y el acceso, teniendo en cuenta que no existía todavía la autopista (diagonal a Tafí Viejo), ni Lomas de Tafí, ni mucho de lo que está a su alrededor, además de ser un lugar totalmente desconocido para la mayoría de los tucumanos”, expresó.
Así se forjó este emprendimiento familiar en el cual, cada uno de los familiares involucrados cumple con su granito de arena. “Así fue cómo iniciamos con mis hermanos, uno trabajando más que otro en el proyecto pero abocados a darle forma a un negocio desconocido para nosotros. Así dimos forma a un grupo económico que llamamos Quinta El Pacará, un complejo de cuatro salones, más dos ubicados en San Miguel de Tucumán uno y otro en Las Talitas, es decir seis salones en total”, explicó.
“Durante 7 años trabajamos codo a codo los 4 hermanos sosteniendo el liderazgo en el mercado y, por otro lado, buscando continuamente el crecimiento. Hoy Keké no forma parte del Grupo Pacará, hace 3 años decidimos trabajar sobre la cultura empresarial de los socios, y eso ayudó a darle una impronta distinta a cada salón. ?eké es un salón de, 600 metros cuadrados, en el lugar en donde se desarrolla la fiesta, 300 metros cuadrados en el área de servicio, 100 m2 de oficina y 2000 m2 entre exteriores y estacionamiento”, precisó.
Al analizar si es lo que se esperaba cuando se sumergió en este rubro, el empresario indicó que al rubro lo fueron conociendo a medida que iban transitándolo. “Inicialmente solo alquilábamos el salón a empresas de catering hasta que armamos nuestra propia estructura y comenzamos realmente a crecer con un estilo y política propia. Sin dudas no nos imaginábamos todo lo que conlleva hacer un evento porque nunca habíamos trabajado en este rubro, veníamos de otro palo así que todo era nuevo. Pero lo conocimos prontamente y fue acertado comenzar a darle forma a nuestra marca con un servicio integral”, aseguró.
“Las claves para perdurar en el negocio son la capacitación como primera medida, trabajar sobre la cultura empresarial, la innovación, el marketing bien dirigido, la inversión, tener claros los números y el sobrecumplimiento. La perdurabilidad depende de este combo, no de dejar que las cosas solo pasen porque siempre pasaron trabajando de una misma forma”, señaló.
Hombre de negocios, Ávila afirmó que “Tucumán tiene grandes empresarios que son un ejemplo de perdurabilidad, empresarios que transitaron todos los estados económicos e inflacionarios y supieron surfear las olas más duras, y eso sin dudas es un gran orgullo para la provincia”. “Gracias a Dios tuve la oportunidad de conocer a muchos de ellos a través de Fundación del Tucumán, que lucha por estar cerca de estos gigantes y darnos la posibilidad a los más chicos de poder aprender de ellos. También a partir de la cuarentena, los empresarios dueños de salones de fiestas pudimos conocernos personalmente y aprender entre todos, cómo seguir”, aseguró.
“Emprender en Tucumán es tan difícil como emprender en la Argentina. La presión impositiva es tremenda y las decisiones políticas no favorecen a las empresas a que puedan avanzar. La inestabilidad y la incertidumbre de cómo seguir, es algo que no deja ser la preocupación diaria. Hoy los que seguimos a pesar de todo, somos héroes”, recalcó.
El rol del empresario
“El empresario tiene un rol fundamental en la sociedad, es quien ayuda a marcar el camino más allá de las políticas y los políticos. El verdadero empresario, no solo compra y vende sino que tiene conciencia social empresarial, ayuda a la sociedad a ser mejor y tiene la responsabilidad de abrir nuevos caminos, invirtiendo, innovando y creando nuevos procesos que luego serán imitados por los que emprenden”, confesó.
En este sentido, destacó que, en estos momentos, el sector es valorado dado que “el usuario está al tanto de los grandes desafíos y pérdidas de los empresarios, y lo valoran”. “La sociedad sabe que los empresarios no reciben ayuda y nos reconocen como grandes guerreros. Esta situación sin dudas cambiará la relación empresario - consumidor”, remarcó.
Al ser consultado sobre los consejos que le daría a aquellos tucumanos que están pensando en emprender o iniciar algún negocio, enumeró:
1) Capacitarse: hay herramientas que ayudan a sostener un negocio y crecer, conocerlas les garantizará el 50% del éxito.
2) Buscar un mentor, alguien que los ayude a conocer los verdaderos desafíos y retos de emprender.
3) Resistir hasta donde sea razonable, no agotar los recursos en lo que pudiera ser insalvable.
4) Incorporar la cultura del sobrecumplimiento.
Panorama actual
Por otro lado, el empresario hizo mención del decreto que suspendió las fiestas en los salones debido al contexto sanitario actual y la posibilidad de que se reanude la actividad a fin de mes (cuando el decreto llegue a su fin). “Veo cero posibilidades de comenzar a partir del 1 de mayo. Seguramente habrá más restricciones que harán más difícil el panorama de los eventos. Esperamos que la provincia analice nuestra nueva propuesta que convierte a los salones en lugares de entretenimiento seguros, si es así será pronta la reapertura”, precisó.
“Si nos permiten trabajar prontamente, vamos a terminar el año bien, porque necesidad de eventos hay, que es lo importante. No damos el año por perdido ni mucho menos. Sabemos que si trabajamos tenemos herramientas para pelear, si nos proscriben te quitan todas las posibilidades de salir adelante, y el panorama a fin de año sería negro. Todo cambió y si no cambiamos vamos a desaparecer. Para continuar habrá que adaptarse a lo nuevo que viene, y hacerlo desde ya. Hoy es momento de invertir, invertir tiempo en pensar cómo seguir cumpliendo estas dos premisas: darle tranquilidad al usuario que nuestra actividad no es peligrosa para su vida y con nosotros puede tener una buena experiencia de usuario, y buscar los apalancamientos que nos ayudarán a pasar este año. Solos y con nuestros recursos agotados no podremos seguir, venimos de un año con números en rojo y este no arrancó mejor. Necesitamos la fuerza de palancas que nos ayuden”, concluyó.
AL TOQUE
- Un proyecto: Lograr crear salones de fiestas 100% seguros.
- Un desafío: Inculcar la conciencia social empresarial en mis colegas para poder lograrlo en conjunto.
- Un prócer:
- Un líder:
- Una sociedad que admire: Las sociedades que promueven el respeto y el orden.
- Un recuerdo: El furor a nivel mundial que representó haber recreado la vecindad del chavo.
- Un sueño: Dejar una marca en las personas que me conocen.
- Un placer: Viajar
- Una comida: Lampreado con puré de papas.
- Una bebida: Coca Zero
- Un libro: Quién se ha llevado mi queso.
- Una película: Vanilla Sky
- Una serie: Lost