Al parecer se alarga la vida del cepo al dólar en nuestro país, y los tucumanos se preguntan en qué podrían invertir y hacerle frente a la inflación.
Desde el 28 de octubre solo se pueden comprar US$ 200 por mes, y los ahorristas observan que sus pesos pierden valor contra la suba de los precios. Es por ello que IN Tucumán dialogó con el economista Javier Gandur sobre cuáles son aquellas opciones que podemos tener en cuenta a la hora de invertir nuestro dinero tras la restricción de obtención de dólares.
“En caso de no poder ahorrar en dólares, debemos buscar las alternativas que en primera instancia pueda mantener el poder adquisitivo de esos U$D200, es decir adquirir algún producto que esté atado a la variación en el tipo de cambio. En su mayoría son artículos que para su producción se utilizan materias primas dolarizadas, además no ser perecederos y que tengan una posibilidad de venta rápida, por ejemplo: Hierro, ladrillos, lubricantes, etc. El ladrillo si bien es un producto con mucha mano de obra local y poco de insumos dolarizados, se comporta mejor que otros”, explicó el economista.
“Un sector que está muy deprimido es el de la construcción, así que es un buen nicho de mercado con amplias posibilidades de inversión o de adquisición de todo lo relativo a la construcción: griferías, electricidad, entre otros”, añadió.
Dicho esto, se consultó al economista en qué productos no deberían invertir los tucumanos.
“No hay que invertir en productos como vehículos o tecnologías, ya que desde el momento de adquisición se pone en marcha la depreciación (pérdida del valor por el uso del bien)”, especificó.
Además quisimos indagar sobre los llamados CEDEARs, como forma alternativa de inversores en el extranjero.
“Los Certificados de Depósito Argentinos (CEDEARs) son instrumentos con operatoria local y representan acciones. Este instrumento se logra acceder a acciones de las principales empresas extranjeras como Apple, Citi, Google, General Electric, entre otras. Obteniendo además de los retornos por la performance en el mercado, cobertura contra el tipo de cambio y una disminución del riesgo local”, explicó.
“Una de las ventajas de este instrumento es que su cotización no depende de la coyuntura política de la Argentina, sino del desempeño de la empresa. Asimismo, es una opción para disminuir el riesgo argentino, pero por la cantidad de dinero mensual ($13.000), me interesaría en adquirir productos locales que puedan llegar a subir sus precios debido a las cuestiones relativas al nuevo gobierno”, sugirió.
Por último, Gandur brindó cuál es su perspectiva de lo que se viene en materia económica en nuestra provincia, teniendo en cuenta las nuevas medidas económicas anunciadas por el presidente electo Alberto Fernández.
“Avizoro una mejora en el mercado interno y mayor intervención del ejecutivo nacional en cuestiones relativas a créditos para viviendas y pymes. Existe una necesidad y es la de reactivar el mercado interno, el 70% de la producción nacional va destinado a ventas dentro del país”, indicó.
“Referido al sector financiero, considero que se verá desalentado y no tendrá la rentabilidad que se observa durante los últimos cuatro años”, precisó.
El economista, además expuso un interesante detalle. “Un informe muy importante es la baja rotación de producto de Línea Blanca en los hogares, por lo que este mismo dato explica una demanda frenada por la situación económica actual, pero asimismo explica el exceso de demanda futura para este sector.
Los sectores más beneficiados por las medidas de Alberto Fernández serán: construcción, electrodomésticos, y alimentos para consumo local”, concluyó.