El pasado martes, se realizó uno de los encuentros más importantes del agro: el Congreso Maizar 4.0. El evento se desarrolló de manera virtual y reunió a más de 6.000 asistentes. Todos los integrantes de la cadena del maíz y del sorgo se conectaron para ser parte del proyecto.
El eje temático centró aspectos tales como biotecnología, manejo de cultivos de maíz y sorgo, actualidad de la cadena, mercados internacionales y el desafío del valor agregado. Además, hubo paneles centrados en el contexto actual debido a la pandemia y sus desafíos.
Por su parte, el ministro de Desarrollo Productivo de Tucumán, Juan Luis Fernández, se refirió a la necesidad de mayores cortes de naftas y gasoil con bioetanol y biodiesel. En este sentido dijo que “la fórmula del bioetanol se castigó durante los tres últimos años de la anterior administración y luego hubo un congelamiento”, por lo que propició “para el sector sucroalcoholero las mismas consideraciones que para Vaca Muerta, sin costo fiscal alguno”. Según el ministro en los últimos dos años la nafta aumentó 134%, mientras el bioetanol de caña sólo lo hizo en un 84%, y “como nuestras naftas tienen un 12% de bioetanol, hay una captura indebida de precios por parte del sector petrolero”, enfatizó.
Asimismo, en el momento de su exposición dijo que la estructura del sector a nivel nacional está compuesta por 13 plantas de bioetanol de caña de azúcar en el NOA; 6 de bioetanol de maíz, fundamentalmente en la región central; y 34 de biodiésel, sobre todo en Buenos Aires y Santa Fe.
Cuando fue el turno del ministro de Industria y Comercio de Córdoba, Eduardo Accastello, dijo que la experiencia en Córdoba con proyectos que garantizaron la cosecha a los productores, la rotación de cultivos levantaron el precio y brindaron granos a los tamberos. “Se fueron así multiplicando las áreas sembradas, la inversión, se fueron sumando alumnos y docentes de la UTN (Universidad Tecnológica Nacional), se movilizó el comercio, los talleres, todo un desarrollo productivo”, lo cual sustenta la necesidad de tener una nueva ley.
Asimismo aseguró que el bioetanol también permite reducir costos, por lo que hay que promover el uso de flex (motores con capacidad de utilizar dos combustibles alternativamente) y reducir el valor de la energía, con lo cual “podemos ahorrar US$ 2.500 millones en sustitución de importaciones”, expresó el ministro. Y, por último añadió que “es importante ir hacia el corte de naftas de 27,5%, mientras al motor flex lo fabricamos en Córdoba”.
De esta manera, los ministros de Tucumán y Córdoba, provincias productoras de caña de azúcar y de maíz respectivamente, destacaron en el encuentro virtual junto a empresarios de la cadena agroindustrial la perspectiva de mayor producción de biocombustibles en el país, para lo cual demandaron una nueva ley sectorial y coincidieron en la necesidad de mayores cortes de naftas y gasoil con bioetanol y biodiesel.
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