Según el último estudio de Randstad, los empleados argentinos quieren obtener principalmente de su trabajo un buen salario y beneficios atractivos pero cada vez priorizan más factores de índole emocional o profesional, como que haya un buen ambiente laboral o la posibilidad de contar con oportunidades de desarrollo. Así se desprende de la edición 2018 del Randstad Employer Brand Research, el estudio independiente de su tipo más completo e inclusivo que con presencia en 30 países tiene su versión local desde 2013.
El informe recogió la opinión de 4230 personas, que a la hora de responder qué esperaban de un buen trabajo eligieron un buen salario y beneficios atractivos (60%), un ambiente de trabajo agradable (57%), oportunidades de desarrollo profesional (55%), seguridad laboral (54%) y un equilibrio entre la vida familiar y profesional (44%).
"Todos deseamos trabajar en empresas exitosas, pero fundamentalmente buscamos sentirnos identificados en valores y cultura, inspirados y motivados. Eso se ve reflejado en el hecho de que desde hace tiempo el salario ha dejado de ser el único factor a la hora de elegir un trabajo, dando lugar a aspectos más ligados a lo emocional, como el ambiente de trabajo, las oportunidades de desarrollo profesional y la seguridad. Sin dudas esto está subiendo la vara de lo que las organizaciones deben ofrecer al talento para poder atraerlo", sostiene Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina y Uruguay.
En la comparación de los empleados argentinos y los de la región hay similitud en la elección y orden de preferencia de los atributos, a excepción de que los trabajadores argentinos ponen el ambiente laboral por encima de las oportunidades de desarrollo profesional respecto de sus colegas latinoamericanos.
Esta valoración de los atributos que debe tener un trabajo en la actualidad queda mucho más manifiesta a la hora de indagar sobre las razones que llevan a los empleados a quedarse en una empresa. Entre los encuestados que no cambiaron de trabajo en el último año ni piensan hacerlo en el próximo los principales argumentos para explicar su permanencia en la misma compañía fueron la seguridad laboral (48%), el equilibrio entre la vida familiar y profesional (44%) y el ambiente de trabajo agradable (41%).
En cambio, entre quienes abandonaron su trabajo o planean hacerlo en un futuro próximo las razones económicas tienen preponderancia. Una compensación demasiado baja (58%), la falta de oportunidades de desarrollo profesional (53%) y la falta de reconocimiento y recompensas (36%) fueron los principales factores para irse.
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