Luis María Terán Vega es el ejecutivo de cuentas de Tengo Free Studio una empresa dedicada al desarrollo de software y en particular de aplicaciones móviles. Lleva su oficina a cuestas, una mochila cargada de cosas y un cuaderno donde anota los sueños de sus clientes que la tecnología convertirá en realidad.
Según cuenta Luis María, la empresa comenzó de la mano de Esteban Juárez Rivas, egresado de la UTN, y un grupo de amigos que crearon una app móvil para bares y restaurantes, pero no los convenció el modelo de negocios y además notaron que podían dar mucho más que eso a la comunidad empresarial.
“Cambió el foco de negocios, nuestros clientes no eran 200 empresas que intentábamos hacerlas encajar en nuestro modelo de negocios, sino éramos nosotros yendo a las empresas a ver las reales necesidades y viendo como podíamos ayudarlos desde una app”, relata el ejecutivo de cuentas, mientras recuerda los comienzos de la, ahora, exitosa empresa
A la hora de hablar de la dificultad para conseguir clientes, Luis María se quita presión y asegura que la tarea se ha simplificado con el correr de los tiempos. “Hoy todos tienen un celular y va viendo como un teléfono con un poco de ingenio y de tecnología le puede solucionar cuestiones de su vida cotidiana, en ese sentido empiezan a relacionarse otras app y con las redes sociales, desde ahí empiezan a fantasear de cómo estas aplicaciones podrían ayudarla en su gestión comercial diaria”
“Además –concluye- la gente conoce muy bien su negocio y sabe de qué forma puede llegar a mejorarlo y siempre partimos de la base de que todo es posible de hacer es cuestión de tiempo y presupuesto”